El complejísimo cuerpo humano puede clasificarse a grandes rasgos en áreas para el tratamiento de diversos problemas y enfermedades.
Cada una de estas áreas problemáticas individuales reacciona positivamente a determinadas materias primas naturales que están representadas en la cartera de productos de sanitas.
Nuestro cuerpo es una estructura anatómica extremadamente compleja. Varios sistemas corporales y orgánicos trabajan juntos para garantizar que las funciones que determinan nuestra vida puedan desarrollarse sin problemas. Aprende más sobre la función de los sistemas más importantes, qué influencias pueden alterar o debilitar el sistema y qué podemos hacer nosotros mismos para evitar que esto ocurra en primer lugar.
Los virus respiratorios, como el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 que se propaga actualmente y los virus de la gripe estacional de distintas cepas, causan enfermedades cuyos síntomas se manifiestan en la inflamación de las vías respiratorias. Un sistema inmunitario fuerte que reconozca a los patógenos invasores y active las defensas del propio organismo es como un escudo protector y ayuda a rechazar los ataques de virus y otros patógenos.
Nuestro sistema urinario es algo así como el «sistema de filtración» de nuestro cuerpo. Además de los riñones, incluye la vejiga, la uretra y los uréteres. Los riñones filtran los minerales y los productos de descomposición metabólica de la sangre, que se eliminan con la orina.
En términos sencillos, utilizamos el término metabolismo para resumir todos los procesos bioquímicos que tienen lugar en las células de nuestro cuerpo.
Nuestra digestión es un sistema muy complejo en el que intervienen la boca, la garganta, el esófago, el estómago, el intestino delgado con el hígado, la vesícula biliar y el páncreas y el intestino grueso.
Nuestro cuerpo está formado por numerosos órganos y sistemas con tareas muy diferentes. Para que todo funcione correctamente, los procesos deben estar coordinados. Las hormonas se encargan de controlar estos procesos biológicos.
La tarea más importante de nuestro sistema circulatorio es suministrar continuamente a todos los órganos y tejidos oxígeno, nutrientes, vitaminas y minerales, y eliminar los productos de descomposición del metabolismo.
La piel es el órgano más versátil de nuestro cuerpo. Ante todo, nos protege de las influencias ambientales externas y de la penetración de agentes patógenos.
Pensar, sentir, percibir, aprender, recordar: debemos estas capacidades a nuestro cerebro y a nuestro sistema nervioso.
Huesos, articulaciones, tendones y músculos: sin ellos no podríamos mantenernos erguidos, caminar o realizar una gran variedad de movimientos.